Heráclito de Efeso, filósofo griego, decía que "la lucha entre contrarios son necesarias para que la razón, logos, realice la armonía y unidad universales". Esta filosofía apasionada encuentra asidero en el actual orden de situaciones que envuelve al Partido Arnulfista, que es foco de atención ante la inminente escogencia de su candidato presidencial para los comicios de 2004.
En ese contexto, Víctor Juliao centra sus aspiraciones políticas, su poder está en la voz apegada a la verdad y llevada a la acción; en esa vía se mantiene, con firmeza, sin contemplaciones de ninguna especie, a sabiendas que es la que conduce a las alturas.
El crédito de Víctor Juliao, se basa en su apreciación honradas, y sinceras, de sus conceptos y sus principios; su voz vibra cuando sale en defensa de los que menos tienen o no tienen nada; por años ha tenido una participación activa atenazada al liderazgo que se genera en la interacción con las bases del Partido Arnulfista. Ya lo dijo don Pablo Arosemena, "el crédito de una persona depende más de su moralidad que de sus facultades pecuniarias. Hay hombres pobres que tienen crédito y ricos que lo tienen escaso".
Así las cosas, y buscando un ambiente donde no brille la política que siempre va acompañada del cruel egoísmo y villano soborno, la balanza de la justicia debe inclinarse por Víctor Juliao, porque es justo apoyar y premiar los méritos alcanzados por este dirigente político y así entenderlo los que hagan uso del sufragio para escoger a la figura que representará a esta pujante organización política en los comicios presidenciales del 2004.
"Nadie puede bañarse dos veces en el mismo río" decía Heráclito, porque las aguas no son las mismas; esto nos enseña que no deben repetirse los errores del pasado cuando la dirigencia política se escogía en base a la grandeza económica de los aspirantes; mientras, los méritos alcanzados a través de la dura militancia quedaban relegados a segundo plano.
Sólo habrá armonía en esta lucha entre contrarios en la medida en que las bases del Partido Arnulfista no sean perturbadas por los intereses de la clase económicamente dominante, que, acostumbradas a las triquiñuelas, siempre buscan confundir y marchitar la labor de los verdaderos protagonistas del fortalecimiento y crecimiento del Partido Arnulfista.
Al respecto, la verdad sobre militancia y carisma político es la prenda que hace brillar el entorno de Víctor, cuya senda a transitar tendrá escollos difíciles pero no imposibles de superar. |