Rusia desafía a EEUU tras
sanciones por venta de misiles a Irán

Esta es una de las instituciones que sufrió
la sanción de los EEUU, la misma puede deteriorar sus relaciones
con Rusia. Foto AP

Moscú
REUTERS
Rusia respondió el
jueves en forma desafiante a las sanciones impuestas por Estados Unidos
y la amenaza de tomar otras acciones contra Moscú por sus presuntas
ventas de misiles y tecnología nuclear a Irán.
El gobierno del Kremlin opinó que un espionaje inepto por parte
de las autoridades de Washington podría ser la única explicación
de esta disputa, que consideró "absurda".
Rusia no ha dado indicios de haber disminuido su cooperación
con Irán y el ministerio de Energía Atómica dijo que
tenía planeado triplicar el número de expertos en energía
nuclear en la región iraní de Bushehr, donde Teherán
construye un reactor nuclear, presuntamente para uso civil.
Estados Unidos ha dicho en reiteradas ocasiones que teme que la instalación
del reactor nuclear iraní sea una operación encubierta por
parte del gobierno de Teherán para obtener de Rusia los elementos
de alta tecnología que necesita para llevar adelante un programa
atómico con fines militares.
"Las acusaciones no tienen base... nuestras organizaciones y empresas
no negocian con Irán en áreas sensitivas o secretas... Se
trata sólo de tecnología avanzada de carácter exclusivamente
civil", dijo a medios de prensa el portavoz del ministerio de Relaciones
Exteriores, Vladimir Rajmanin.
El gobierno estadounidense prohibió el martes el suministro de
ayuda y los vínculos comerciales con tres institutos científicos
de Rusia, en un gesto mayormente simbólico que provocó una
airada condena por parte de las autoridades del Kremlin.
El miércoles, Estados Unidos, agregó una nueva amenaza,
mucho más poderosa financieramente, de limitar los lanzamientos de
elites estadounidenses por medio de cohetes rusos, a menos que Moscú
pusiera fin a la presunta cooperación con Irán.
Un portavoz del Centro Espacial ruso Khrunichev dijo que Moscú
perdería unos 270 millones de dólares en 1999 si Estados Unidos
cumplía su amenaza de limitar los lanzamientos de satélites
utilizando cohetes rusos.
El portavoz del presidente ruso Boris Yeltsin dijo que el líder
del Kremlin, de 67 años, seguía muy de cerca el desarrollo
de los acontecimientos y que esperaba que no se llegara a un deterioro irreversible
de las relaciones entre Washington y Moscú.
"Periódicamente, nuestras relaciones tropiezan con estos
obstáculos, que si no son resueltos a tiempo podrían constituir
un grave problema. Afortunadamente, tenemos una serie de mecanismos bilaterales
para sortear todos estos conflictos", dijo el portavoz presidencial
ruso, Dmitry Yakushkin, a la radioemisora Ekho Moskvy.
"Nuestros especialistas tienen que echar un vistazo a este asunto
tan pronto como sea posible y hallar una respuesta adecuada", agregó.
El Servicio Federal de Seguridad de Rusia, la organización descendiente
de la temida KGB de la era soviética, aprovechó la situación
para criticar a sus rivales estadounidenses, afirmando el jueves que las
medidas del gobierno de Washington podrían estar inspiradas por algún
trabajo inepto de sus servicios de espionaje.
"Esperamos que esta situación sea el resultado de un malentendido,
y quizás de un mal trabajo de los servicios especiales (de seguridad)
estadounidenses", dijo el Servicio Federal de Seguridad ruso en un
comunicado.


|