Un hombre de 55 años dio muerte a su esposa y sus dos hijos antes de quitarse la vida, en una tragedia familiar ocurrida en la localidad de Vigano (norte), informó ayer la policía.
Según una primera reconstrucción de los hechos, Fausto Zoia, contable de profesión, disparó con una pistola contra sus dos hijos varones, de 25 y 19 años, cuando estos dormían, y después acabó con la vida de su esposa. Acto seguido utilizó la misma arma para quitarse la vida.
Los agentes acudieron al lugar de los hechos tras la alarma dada por los vecinos que escucharon los disparos.
El autor de la masacre trabajaba como contable de forma independiente para varias empresas de la zona, y, al parecer, en los últimos tiempos atravesaba por una etapa depresiva tras haber visto una disminución de sus clientes.
La familia habitaba en Vigano (en cercanías de Lecco) desde 1985, por lo que el suceso ha provocado una gran consternación en la localidad. |