Cerca de 3.000 indios guaraní y caiauá, armados con arcos, flechas y escopetas, y pintados para la guerra, invadieron en las últimas semanas cuatro haciendas en el estado brasileño de Mato Grosso do Sul, informó ayer la prensa.
Los indios, que exigen la ampliación de su reserva en el municipio de Japorá, próximo a la frontera con Paraguay, amenazan con invadir otras cinco propiedades en los próximos días, según un amplio reportaje del diario "Folha de Sao Paulo".
Las dos etnias aseguran que las tierras ocupadas les pertenecen y expulsaron de las mismas a por lo menos ocho trabajadores. |