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Miguel Fanovich envió una carta por una glosa publicada el pasado 3 de enero donde se afirma: "Que un ex gobernador de Chiriquí llegó el 31 de diciembre al parque de Cervantes a repartir botellitas de licor a los limpiabotas. Ahora le han puesto el mote de Miguelito Pachita". El texto de la réplica es el siguiente:
"Es obvio que se trata de un rumor tendencioso, maligno, convertido en noticia con el avieso propósito de injuriarme y de dañar mi imagen como candidato a legislador en el circuito 4-1. Primero, porque es falso de toda falsedad que en la fecha señalada o en cualquier otra ocasión yo haya salido a hacer campaña o a ganarme la simpatía de los electores repartiendo botellitas de licor; fui a ese lugar a repartir bolsas de comida a la gente humilde.
Y esto lo puedo probar, cosa que no puede hacer la persona que escudándose en el anonimato lo dio a este periódico, sorprendiéndolo en su buena fe, un dato falso, dañino, irrespetuoso y evidentemente encaminado a favorecer a mis adversarios políticos en este circuito.
Segundo, porque me sorprende el trato irrespetuoso que se me ha inferido en este medio de comunicación si se toma en cuenta el hecho de que cuando fui gobernador hice una administración de puertas abiertas donde a los comunicadores sociales siempre se les dispensó un trato respetuoso, amable y preferencial, casi excepcional en los anales de las administraciones que me precedieron.
También siento que hay algo de hipocresía y de doble moral cuando se me ataca de esta forma tan baja y artera en un medio de comunicación. Porque no comprendo que un comunicador social o un medio de comunicación se alarme por un hecho falso (regalar botellitas de aguardiente a limpiabotas del parque de Cervantes) que, en el más remoto caso de que fuera cierto, implica asimismo desdén, menosprecio, por esta gente humilde, castigada socialmente, a quienes todos -especialmente las autoridades de policía y los periodistas farsantes- critican que beban licor en dicho parque.
¿A dónde, a qué club social, pueden ir y ser admitidos estos hombres humildes a quienes todo el mundo ultraja y critica?
Pero especialmente, señor director, ¿por qué esta columna de glosas anónimas no dijo nada cuando un candidato a legislador de este circuito, con motivo del Día del Periodista, obsequió botellas de guaro que llevaban impresa en láser una etiqueta y una dedicatoria especial para cada uno de los periodistas de esta provincia?
¿Será acaso que este comunicador social que hipócritamente buscan enlodar mi imagen tiene celos de esta gente humilde y quieren acaparar todas las botellitas y botellones de guaro que real o ficticiamente distribuyen los políticos de este circuito para seducir a los votantes e, incluso, para seducir a él mismo y que hoy, en las sombras, en el anonimato, me ataca injustamente como si él estuviera fueran ajeno a las tentaciones de las pachas y otras sinecuras que nunca dejan de ofrecerles sus mentores políticos? |
