REFLECTOR
Pinta de yeyo

El pelao Rony Esteban es uno de esos manes que no tiene que estudiar porque su papito y mamita le dan de todo. Estudia en una universidad privada, tiene un auto último modelo, viste a la última moda, siempre tiene su billetera repleta de verdes y, por supuesto, tiene una pinta de yeyo que no se la quita ni Tarzán.

Sucedió que el man siempre parqueaba con las yeyas de su facultad en una de las discotecas sólidas de la capital, de esas que uno necesita tener tremendo apellido para poder entrar.

Bueno, sucedió que un día Rony decidió parquear en Veracruz y en uno de los ranchos conoció a una tremenda morenaza, guenona hasta la punta de los pies, con tremendas sentaderas, que dejaron al man babeando de las ganas. Se trataba de Betzi, la chica irradiaba encantos y claro su pechonalidad terminó de conquistar al man. Que va papá, aquello fue amor a primera vista y al momento se inició tremendo rochín, que para qué les cuento, aquello fue peor que en las telenovelas. Betzi y Rony se juraron amor eterno, claro la guial también tenía pinta de yeyesita.

Pero que va papá, la guial era tremenda racataca, originaria de Torrijos Carter, con tremendo chulo, el verdadero amor de la Betzi, que ni para qué te cuento. En resumen, la guial le daba al "Fulo", todo lo que recaudaba con el sudor de su cuerpo.

Cuando la chica comenzó a salir con Rony, su situación económica mejoró grandemente, siempre tenía chen chen y vestía al último grito de la moda, por supuesto, todo de marca. Claro, que después los verdes se los daba al Fulo, quien se estaba dando la gran vida a costa de la guial.

Un día, Rony le dijo que no podía llevarla a una de sus movidas, porque era sólo para hombres y claro, que Betzi no dijo nada porque aprovecharía esos momentos en los brazos de su adorado tormento. Ni lerda ni perezosa se mandó para la casa de Fulo y lo conquistó para que fueran para un "push botton" a gozar con aire acondicionado.

Cuando iban en un taxi, el pelao Rony desde su carro vio a su chica romanceando con tremendo chombón, y se dispuso a seguirlos. Para su sorpresa entraron a uno de esos rinconcitos que abundan en la vía Transístmica y llenos de pasión se disponían a entrar a uno de los cuartos cuando el yeyesito enfurecido, agarró a puños y patadas al man y por supuesto que la chichi también tomó, le dio su par de pescuezones y la agarró por los cabellos y la subió a su carro.

Ay papá, cuando estaba en el carro la guial enfurecida, le gritaba a Rony, "bruto, como pudiste hacerle eso al Fulo, qué te pasa, te crees que porque tienes plata, puedes hacerle eso a mi hombre". Y qué va papá, fue allí cuando el yeyo se transformó en Hulk y hasta se puso verde de la rabia, y ¿qué creen que pasó? Adivinaron, le soltó un gancho de izquierda a Betzi y le partió la cara, le quitó todas la joyas que le había regalado y la bajó a empujones del auto.

La guial herida fue a buscar consuelo con su adorado tormento, pero cuando éste la vio, le dijo que si no quería que le terminarán de partir la cara, que lo dejara en paz. Y fue así que Betzi comprendió que la vida es muy dura, y que era mejor estar sola que mal acompañada.

 

 

 

 

 


 

Sucedió que el man siempre parqueaba con las yeyas de su facultad en una de las discotecas sólidas de la capital, de esas que uno necesita tener tremendo apellido para poder entrar.

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

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