Murió Roberto Tyrrell, un panameño leyenda del fútbol costarricense

Carlos Alberto Martínez
Crítica en Línea

Un panameño que se convirtió en una verdadera leyenda del balompié del vecino país de Costa Rica, Roberto Tyrrell, falleció al mediodía del pasado domingo 25 de abril, víctima de cáncer prostático, según informaron fuentes ligadas a sus familiares y de los cuales se hizo eco primeramente, la prensa "tica".

Las honras fúnebres de quien fuera uno de los mejores guardavallas que ha tenido nuestro fútbol y quien posterior a su carrera como futbolista se había convertido en exitoso empresario e impulsador de programas de fútbol como lo fue en los primeros años del programa del Fútbol Infantil del Club Rotarios Panamá Sur, se realizarán esta tarde en la Iglesia de Guadalupe al que se espera la presencia de personalidades del deporte y del fútbol en especial del pasado y el presente, incluyendo representantes del Club Liga Deportiva Alajuelense de Costa Rica, equipo donde logró su cenit futbolístico.

Tyrrell, comenzó su carrera deportiva en Panamá con el Instituto Técnico Don Bosco, de donde había sido escogido para representar a nuestro país en el primer Torneo Juvenil de CONCACAF de 1962, y luego en el primer NORCECA o Copa de Naciones, en El Salvador, en 1963, que fue un antecedente de lo que en 1991 sería la actual Copa de Oro.

De allí, fue que por su talento y pese a su poca estatura para desempeñarse como arquero, había sido probado para luego quedarse en el pórtico del equipo "manudo", que había gozado de fama por su vuelta al mundo, y luego haber protagonizado grandes partidos con el archirrival del LDA, el Deportivo Saprissa, y diferentes eventos, dejando el nombre de Panamá en alto y convirtiéndose en un verdadero ídolo y leyenda del fútbol tico, alternando a figuras como Errol Daniels, Rolando Villalobos y el técnico chileno, Don Hugo Tassara.

El deceso de Roberto Tyrrell sigue siendo muy sentido en la esfera futbolística. Ayer, la FEPAFUT realizó su primer acto bajo la tutela de Juan Urriola lamentando su pérdida, mientras que será difícil llenar su vacío que sólo dos panameños en la actualidad, Percival Piggott, en Herediano, y Frank Lozada, en Carmelitas, pudieran servir de norte en el exigente balompié vecino.

 

 

 

 

 




 

Las honras fúnebres de quien fuera uno de los mejores guardavallas que ha tenido nuestro fútbol y quien posterior a su carrera como futbolista se había convertido en exitoso empresario e impulsador de programas de fútbol como lo fue en los primeros años del programa del Fútbol Infantil del Club Rotarios Panamá Sur, se realizarán esta tarde en la Iglesia de Guadalupe al que se espera la presencia de personalidades del deporte y del fútbol en especial del pasado y el presente, incluyendo representantes del Club Liga Deportiva Alajuelense de Costa Rica, equipo donde logró su cenit futbolístico.

 

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