La noche del jueves llegó a suelo panameño el salsero de todos los tiempos, Oscar De León, quien tenía rato de no venir a Panamá.
Feliz a su llegada, Oscar se fue a hospedar al hotel donde se han quedado por años los artistas para descansar.
Ayer viernes, horas antes de su presentación, Oscar se fue de paseo por la ciudad. Dicen que tiene muchas amistades panameñas a las que les había prometido visitar.
También pudimos conocer que este artista es un enamorado de la comida panameña, por ello cada vez que viene se escapa para comer.
Oscar, como siempre, montó un show de primera dejando a todos los salseros satisfechos.