El bungee jumping es un deporte extremo en el que una persona se lanza al vacío atada a una cuerda elástica que a su vez va unida a una plataforma. Tras un vertiginoso descenso, y un segundo antes de estrellarse contra el suelo, la milagrosa cuerda se tensa y la persona queda pendulando en el aire.
El origen de este deporte se remonta a una tradición de las islas de Nueva Guinea en el Pacífico Sur. Este tipo de salto era una prueba de hombría entre algunos grupos étnicos y consistía en saltar desde una torre de madera con una planta enredadera sujeta a los pies, para casi tocar el piso con la cabeza.
En la actualidad no se utiliza ninguna planta, se usa el mismo tipo de cable usado en los paracaídas.
Esta liga que soporta toneladas de peso, es la que va conectada a un arnés sujetado al tórax o pies del arriesgado individuo, y la liga a la vez está amarrada a un puente o una plataforma de lanzamiento.
Los que lo practican aseguran que es aún más emocionante que el puenting, deporte con el que sólo tiene una diferencia fundamental: la cuerda utilizada es elástica.
Este deporte extremo incluye medidas de seguridad que garantizan la integridad de los saltadores, incluido un equipo con un arnés especial, un bumper acolchado para impedir entrelazamientos y un conjunto de fijaciones para que la caída sea controlada y el frenado progresivo.