La tropa tortuguera lanzó una voz de alerta. En el 2007 esperan ser un hueso bien duro y no un jamón para todos sus rivales.
Ismael Martínez un técnico cubano de mucha experiencia, sabe que tiene una meta que cumplir con sus muchachos. Acostumbrado a ganar con el equipo Industriales de La Habana, el isleño tiene fe y confianza en el equipo juvenil de Bocas del Toro.
"Hay plena confianza en ellos y debemos salir a jugar una pelota de fundamento", dijo Martínez.
El cubano es seguidor del juego defensivo. "Mi doctrina es la defensa", dijo. "Tu puedes llegar muy lejos con la defensa, te toma menos tiempo perfeccionarla que el bateo", sostuvo Martínez.
Bocas saldrá a jugar y a pelear cada uno de sus partidos. Este año no habrá los biotipos de peloteros grandes y de piel morena. El juego defensivo, la habilidad y buenos brazos, parecen ser sus principales herramientas.
Martínez acepta los errores en el terreno, pero no tolera la falta de atención al juego. "Hay que meterse en el juego, para ganar", indicó.