El primer ministro británico, Tony Blair, llega a Bagdad en visita sorpresa. Blair conversó con el primer ministro y el presidente de Irak como parte de su gira por Oriente Medio.
La visita de Blair se produce el mismo día en que un grupo de hombres armados vestidos con uniformes policiales realizaron un secuestro masivo en las instalaciones de la Media Luna Roja en Bagdad.
Durante su viaje, Blair también ha estado en Turquía y en Egipto, en donde se reunió con el presidente de ese país, Hosni Mubarak.
Según Blair, la región se enfrenta a "un momento crítico de decisiones".
Dijo que resolver el conflicto entre israelíes y palestinos era crucial para la estabilidad. La última vez que el primer ministro visitó Irak fue hace seis meses.
Este viaje ocurre un día después de que el primer ministro iraquí Nouri Maliki hizo un llamado a los antiguos miembros del ejército de Saddam Hussein para que se reintegraran a las fuerzas armadas.
También se produce después de la publicación del informe del grupo de Estudio de Irak, encabezado por el ex secretario de Estado de EE.UU., James Baker, que describió la situación en el país como "grave y en deterioro".
El informe también recomienda la retirada de las fuerzas estadounidenses en 2008.