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Mantienen discusión con FARC para liberar soldados y policías
Bogotá
EFE
Una comisión gubernamental y del legislativo colombiano, integrada además por el procurador general y el Alto Comisionado para la Paz de Colombia, viajó ayer a las selvas del sur del país para discutir con los jefes de las FARC la liberación de más de 450 soldados y policías. Se trata de lograr un "acuerdo humanitario" para la puesta en libertad de los rehenes de los rebeldes y de una cifra similar de guerrilleros presos. El procurador general colombiano, Jaime Bernal, declaró a la prensa en San Vicente del Caguán, en la zona neutral del departamento del Caquetá, que el objetivo de la reunión es la de reactivar una ley de canje o intercambio de los uniformados cautivos por los rebeldes presos en distintas cárceles del país. La delegación oficial se trasladó desde San Vicente del Caguán a Caquetania, un caserío en medio de selvas y sabanas amazónicas donde se celebra la reunión. "Vamos a escuchar la propuesta de las FARC, el intercambio humanitario y trataremos de encontrar una salida conjunta", dijo Bernal. El representante a la Cámara e integrante de la comisión de paz del Congreso colombiano, Luis Fernando Velasco, declaró que el Legislativo "hará su trabajo". Por parte de las FARC, asisten a la reunión su máximo comandante, Manuel Marulanda Vélez, alias "Tirofijo" y "Raúl Reyes", entre otros. La principal guerrilla colombiana propuso desde hace meses al gobierno del presidente, Andrés Pastrana, un "canje" o intercambio de sus rebeldes por los "prisioneros de guerra", algunos secuestrados desde diciembre de 1997 y los demás en distintas acciones contra bases militares o antinarcóticos, cuarteles policiales o ataques a pueblos. En la última semana el Gobierno y el Congreso insistieron en que, por medio de un acuerdo de "carácter humanitario" y que sería para aplicar una sola vez, se podría lograr el "canje", aunque a ese intercambio hay que exigir a la guerrilla que libere también a los civiles nacionales y extranjeros en su poder.
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En la última semana el Gobierno y el Congreso insistieron en que, por medio de un acuerdo de "carácter humanitario" y que sería para aplicar una sola vez, se podría lograr el "canje", aunque a ese intercambio hay que exigir a la guerrilla que libere también a los civiles nacionales y extranjeros en su poder.
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