Domingo 13 de dic. de 1998

 








 

 

 


Abortos:Una vida sin luz

Vladimir Rodríguez
Crítica en Línea

El sol se ocultaba lentamente en el horizonte cuando la luna intentaba realizar su imponente llegada en la oscuridad, de igual forma el pensamiento de Rebeca sufría casi el mismo "fenómeno", cuando la idea de ser madre se desvaneció y sólo pensaba en la posibilidad de salir de su "problema".

De sus tres mejores amigas: Carmen, Beatriz y Sofía, sólo una le recomendó practicarse el pecado más grande considerado por la iglesia católica y la sociedad en general, el cual consiste en quitarle la vida a un ser humano: "el aborto".

Beatriz, quien conocía perfectamente a Rebeca, le sugirió algunos remedios para provocarse el aborto y hasta le consiguió la dirección de un lugar donde podía resolver su "problema".

El supuesto "problema" de Rebeca se había originado en una discoteca cuando tuvo un encuentro casual con Jorge, quien fue su novio durante dos años, pero por diferencias familiares no pudieron continuar su relación.

Al encontrarse en una discoteca ubicada en calle 50, Jorge se mostró muy contento de volver a encontrarse con su exnovia, por lo que le pidió que se frecuentaran posteriormente. Rebeca, aunque mantenía un noviazgo de seis meses, decidió complacer a Jorge, por lo que salió en varias ocasiones con él.

Sin embargo, Jorge sabía que la familia de Rebeca no estaría muy complacida con aquel encuentro, sobre todo por las diferencias que mantenían debido a un estúpido racismo, el que no se debe dar en nuestro país, donde la mezcla de razas es natural.

Rebeca, quien cursaba el tercer año en una Universidad privada, tenía la intención de conversar con su familia para que terminara su actual relación y le dieran cabida a Jorge como su único amor.

Sin embargo, el padre de Rebeca, que se enteró de las andanzas con su exnovio, le dijo que nunca permitiría una relación con alguien como Jorge, pero ella se mostró indiferente frente a esa posición.

Un día Jorge realizó una fiesta en su casa y le pidió a Rebeca que asistiera porque él la había organizado por su encuentro después de tanto tiempo, e inclusive invitó a viejos amigos que los conocieron cuando eran novios.

Después de realizar la fiesta, Rebeca le confesó a su amiga Beatriz que había tenido relaciones con él, ese mismo día, y que no sabía qué hacer porque no utilizó protección.

Beatriz, quien le dijo a Rebeca que no se preocupara, le pudo conseguir inyecciones y algunas pastillas conocidas para provocarse el aborto, ya que para su amiga sería un gravísimo problema tener un niño cuando mantenía una relación con otra persona y, sobre todo, porque los padres nunca aceptaron su relación con una per

 

 

 

 


 

De sus tres mejores amigas: Carmen, Beatriz y Sofía, sólo una le recomendó practicarse el pecado más grande considerado por la iglesia católica y la sociedad en general, el cual consiste en quitarle la vida a un ser humano: "el aborto".

 

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