Complace acercamiento entre guerrilleros
y paramilitares
El proceso de paz en Colombia vuelve a tomar fuerza con
la suma de los paramilitares al mismo. Foto AP
Bogotá
EFE
El gobierno reaccionó
con complacencia al enterarse del diálogo que sostuvieron un jefe
guerrillero y otro paramilitar con el objeto de llegar a una reconciliación
entre los grupos de alzados en armas de Colombia.
Antonio García, jefe político del movimiento izquierdista
Ejército de Liberación Nacional (ELN) y el máximo jefe
de las Autodefensas Unidas de Colombia (AUC), Carlos Castaño, sostuvieron
un diálogo radiotelefónico, según dijeron varios telenoticieros.
"El proceso está caminando y se están abriendo puertas,
las cuales no debemos permitir que se cierren", manifestó el
presidente Andrés Pastrana en una charla con un grupo de periodistas
extranjeros.
Castaño le pidió perdón a García por los
excesos que su organización ha cometido con la población civil
que ha caído bajo el fuego de sus armas, tras acusarlos de ser guerrilleros.
"Si usted quiere, yo le pido perdón a través de este
medio ante el mundo por algunos excesos que hayamos cometido. Pero créame
que mi conciencia está tranquila cuando sé que son guerrilleros
de civil los que han caído en este combate", aseguró
Castaño al vocero del ELN.
Le recalcó que las "conversaciones con el gobierno son unas
y las conversaciones con las autodefensas tendrán que ser otras".
Sin embargo, García le replicó que no creía conveniente
llamar a la distensión, al diálogo, a la modestia sobre "hechos
de sangre".
Pastrana destacó el diálogo entre los dos jefes como "una
puerta más que se abre hacia el camino de la reconciliación",
entre dos grandes enemigos en el conflicto armado que vive este país
desde hace casi cuarenta años.
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