Puerto Príncipe, la capital de Haití, quedó ayer paralizada en medio de disturbios y un ambiente de gran tensión después de la publicación de los resultados de las elecciones legislativas y presidenciales del 28 de noviembre.
Las oficinas públicas y privadas no funcionan y el comercio formal y los bancos están cerrados, mientras que las calles están obstaculizadas por barricadas, en muchos casos formadas por neumáticos incendiados, y por grandes piedras.
Los supermercados y las estaciones de gasolina cerraron sus puertas anticipándose a los disturbios.
Los datos oficiales, hechos públicos por el Consejo Electoral Provisional (CEP), dieron la victoria a la candidata a la Presidencia Mirlande Manigat, quien obtuvo el 31.37% de los votos y disputará la segunda vuelta con el oficialista Jude Celestin, quien consiguió el 22.48%.