El presidente Alterno del Parlamento Latinoamericano, Amílcar Figueroa, no sabe hasta el momento por qué fue retenido en el Aeropuerto Internacional de Tocumen el pasado miércoles, por eso nombró un abogado que lo asista. Tampoco negó haber conocido a Raúl Reyes, el asesinado líder de las FARC.
"Raúl Reyes era un revolucionario de América Latina, y yo soy un militante de izquierda; desde los 13 años me incorporé a las filas de la revolución de América Latina. Conozco a muchos revolucionarios colombianos de la Unión Patriótica (UP) que fueron masacrados por la oligarquía colombiana, asesinados", argumentó Figueroa.
Contó que muchos de ellos-miembros de UP-tuvieron que tomar el camino del exilio y allí conoció "a cantidad de dirigentes y puede ser que haya conocido a Raúl Reyes. Conocí a Ricardo Granda, el denominado canciller de las FARC, llegó a Venezuela perseguido del partido comunista, eso no es ningún delito, obtener ideas revolucionarias".
El presidente Alterno del PARLATINO fue retenido en la terminal aérea por 11 horas al señalarle miembros del Servicio Nacional de Migración su impedimento de entrada al país por un posible caso pendiente desde la época militar de Manuel Antonio Noriega.
Figueroa dijo estar asombrado, ya que ha ingresado a Panamá 14 veces en los últimos dos años, y mostró su pasaporte. Calificó la acción de los funcionarios aeroportuarios como un hecho "desmedido" al haberle quitado su pasaporte diplomático.
"Unos funcionarios me hablaban de un impedimento surgido en 1999. La última vez que estuve en Panamá fue en 1987. Otro dijo que fue en 1989. Hubo un enredo allí", subrayó.
Dijo no haber tenido problemas con Noriega, pero aseguró que visitó Panamá debido a la situación de El Salvador y fue objeto de un seguimiento de la CIA.