Mahuad en la cuerda floja por crisis, según analistas

Agencias
Internacionales
El presidente Jamil Mahuad camina en la cuerda floja: un explosivo cóctel de conflictos sociales y la crisis económica de Ecuador amenaza sacarlo del poder si no mejora su gestión, según analistas y críticos. Los más recientes sondeos dicen que Mahuad, un abogado de 50 años educado en Harvard, vio caer su popularidad a 14 por ciento en 15 meses de gestión, según sondeos de opinión. Esa falta de apoyo es producto de que generó falsas expectativas en sus políticas para sacar al país de su peor crisis económica en décadas, según los analistas. "O renuncia o accede al pedido colectivo de que produzca urgentes rectificaciones en la conducción de su gobierno", dijo el analista político Alfredo Negrete. Los cambios deben llegar a corto plazo, porque las protestas se agudizarán en este país que lleva 20 años viviendo en democracia, según militantes de diversos sectores sociales. "Si el gobierno no cambia de estrategias y no hace una reingeniería, todo puede pasar", dijo Antonio Vargas, jefe de la poderosa organización indígena Conaie, que condujo una protesta contra Mahuad en julio, cuando unos 8.000 indígenas cercaron a Quito. "Planteamos la reestructuración del Estado y un nuevo modelo económico ya que el neoliberalismo no ha funcionado y por ello enfrentamos la actual crisis", agregó el líder del grupo, que dice representar a un 40 por ciento de los 12,2 millones de ecuatorianos. Ecuador, que declaró meses atrás la moratoria de su deuda externa, sufrirá este año una contracción económica de al menos seis por ciento y la inflación más alta de América Latina por segundo año consecutivo. A ello se suma un adverso cuadro marcado por un 17 por ciento de desempleo, 62,5 por ciento de pobreza y alza de tributos a partir del 2000, como requisito para sellar un largamente ansiado acuerdo con el Fondo Monetario Internacional. Según diplomáticos, los crecientes pedidos de renuncia del presidente denotan su dificultad en lograr sólidos pactos con un arisco Congreso, que no cesa de ponerle trabas y que actualmente es motivo de una nueva pugna, ante la resistencia a aprobarle el presupuesto público del 2000. En las calles, los rumores de golpe de Estado o pedidos de disolución del Congreso volvieron a ser temas de conversación como vías para salir de la crisis, que ha provocado la devaluación del sucre en 61,1 por ciento en lo que va del año. Sin embargo para algunos, la salida de Mahuad traería más caos al ya turbulento historial político de Ecuador, que entre mediados de 1996 y 1998 vio el paso de tres presidentes. "El gobernante debe concluir su periodo, pero tiene que enfrentar la realidad y cambiar de rumbo.Si no lo hace, él mismo se irá al despeñadero", opinó el analista y diputado opositor del movimiento Pachakutik, Antonio Posso. La última caída de un mandatario fue cuando en febrero de 1997 el Congreso destituyó al entonces presidente Abdalá Bucaram bajo el cargo de "incompetencia mental" para gobernar. A las protestas por la conducción económica se sumó un intento de la rica provincia del Guayas por lograr su autonomía financiera y administrativa, en un plebiscito previsto para enero. En el gobierno, los pedidos de renuncia son vistos como un juego político de inestabilidad y fragmentación promovido por sectores que ya piensan en las elecciones municipales de abril del 2000. "Eso (la renuncia) está absolutamente descartado", dijo el ministro de Gobierno, Vladimiro Alvarez, sobre el llamado para que Mahuad acorte su mandato, que termina en enero del 2003. Según Alvarez, ni la búsqueda de autonomía de Guayas ni la acusación de presunta malversación de fondos electorales contra Mahuad, hecha por un ex banquero encarcelado, harán que éste deje de seguir gobernando. El pronunciamiento se produjo luego que un alto jefe militar advirtió el sábado de amenazas a la estabilidad institucional del país. Las últimas protestas civiles contra Mahuad ocurrieron en julio, cuando las centrales obreras semiparalizaron al país durante casi dos semanas, forzando al mandatario a anular un alza en los combustibles. En la comunidad empresarial también se se apunta a Mahuad como responsable de encontrar una salida a la crisis, que se ha traducido en más impuestos y 14 bancos quebrados desde 1998. "Lo que le pasa ahora al Ecuador es que es una empresa sin un gerente capaz", dijo el influyente banquero Rodrigo Paz, que una vez fue el mentor político de Mahuad.
|