El 13 de noviembre de 1982 tuvo lugar un combate cuyo trágico desenlace cambiaría muchas reglas del pugilismo.
El campeón mundial de las 135 libras, Ray "Boom Boom" Mancini (izquierda), en un brutal combate, noqueó al surcoreano Duk Koo Kim en el 14to asalto.
Luego, Kim entró en coma y murió cuatro días después. Tras su muerte, el Consejo Mundial de Boxeo anunció que reducía de 15 a 12 asaltos las peleas de campeonato mundial. Además, la Comisión Atlética de Nevada aumentó el número de sogas en los cuadriláteros, y se establecieron controles médicos más estrictos para los boxeadores.