Al menos dos muertos y 35 heridos dejó una campaña dinamitera lanzada ayer por presuntos rebeldes de las FARC en las ciudades colombianas de Arauca y Barranquilla, en momentos en que el presidente Alvaro Uribe estudia nuevas medidas para tratar de contener la violencia urbana.
El caso más grave de este lunes ocurrió en la nororiental Arauca -fronteriza con Venezuela-, donde al menos dos policías murieron y diez civiles resultaron heridos al explotar un coche bomba abandonado por desconocidos en un sector céntrico a pocas horas de que Uribe visitara esa ciudad para evaluar la situación de orden público.
La visita de Uribe a esa ciudad estaba dispuesta de antemano, señaló la ministra de Defensa, Martha Lucía Ramírez. Según el alcalde de la localidad, Jorge Cedeño, la explosión del vehículo con matrícula venezolana se registró a las 06H20 locales (11H20 GMT), causando la muerte instantánea a dos policías que se disponían a desactivarlo.
Ramírez señaló previamente en Bogotá que Uribe reaccionó con "preocupación y dolor" ante el ataque de Arauca, y que el mandatario está determinado a combatir sin tregua a los grupos violentos en las zonas rurales y urbanas.
Mientras Uribe presidía el consejo de seguridad en Arauca, un artefacto activado por milicianos (combatientes urbanos) de las FARC estalló en en céntrico sector de Barranquilla, cerca de la concurrida Universidad del Atlántico, una empresa procesadora de leche y una asociación de ganaderos, causando heridas o lesiones leves a por lo menos 25 personas.
El jefe policial de la región, el coronel Luis Estupiñán, afirmó que los desconocidos hicieron estallar previamente varias bombas de bajo poder en el interior de la universidad, sin causar víctimas ni daños allí.
La semana pasada las FARC intensificaron sus acciones violentas en Bogotá, donde un coche bomba instalado frente a la sede de la Policía Metropolitana y un ataque contra un camión repleto de agentes de ese organismo, el martes y el jueves, mataron a tres personas -dos agentes y un civil- e hirieron a 62, según las autoridades. |