El presidente de la Asamblea Legislativa, Carlos "Titi" Alvarado, parece haber decidido ser el promotor del periodo de consultas con los sectores sociales y políticos de la sociedad panameña para lograr un consenso para introducir reformas integrales a la Constitución. Sostuvo que para reformar y modernizar el Estado panameño hay que partir de la premisa de la modificación total de la Carta Magna.
Detalló que aspectos como la independencia legítima de los Organos del Estado, la escogencia de los magistrados de la Corte Suprema de Justicia, la independencia del Tribunal Electoral para legislar temas que le competen y el aspecto de fiscalización de la Contraloría General serían algunos de los puntos por donde debería encaminarse una reforma constitucional.
Alvarado manifestó que a nivel del Organo Legislativo se están realizando consultas con las directivas de todos los partidos políticos para conocer de diferentes tópicos políticos de carácter nacional relacionados a este tema. "Hemos iniciado esta ronda de negociaciones con la sociedad civil y los partidos políticos con el objetivo de modernizar el Estado panameño", señaló.
Alvarado aseveró que una vez terminada las consultas, la directiva de la Asamblea anunciará las iniciativas que se propondrán para la discusión de proyectos de ley.
El presidente del legislativo agregó que los cambios constitucionales son urgentes para modernizar el Estado de derecho nacional. Sin embargo, no todos sus colegas en la Asamblea Legislativa comparten sus criterio, por ejemplo, el perredista Carlos Smith consideró que para resolver los graves problemas sociales del país no es necesarios sumir a la población en un tema tan complejo como reformas a la Constitución Nacional.
"Nosotros hemos dicho hasta la saciedad y volveremos a mantener este criterio de que no es poniéndole un nuevo vestido a la Constitución de este país como vamos a resolver los problemas fundamentales de desaceleración económica, de desempleo y el problema del estancamiento social que vivimos", agregó.
Smith manifestó que es necesario reconocer que el pueblo panameño lo que más quiere es saber como vamos nosotros los políticos a resolver el problema de la miseria, corrupción e incredibilidad frente a la gestión estatal.
Sostuvo que es peligroso emplear las reformas constitucionales para "apantallar" los problema nacionales urgentes por resolver, porque entonces se estaría jugando con la inteligencia de la población.
"Es importante que todos los partidos políticos se pongan para plantear lo que sería la primera propuesta de reforma constitucional, que luego de las elecciones del 2004 se empezarían a definir con una Asamblea Legislativa renovada en criterios y figuras", añadió.
El perredista sostuvo que sin el consenso y la voluntad de Estado va a ser difícil que una propuesta de reformas a la Constitución pueda pasar a través de un plebiscito.
"Por ningún momento estas propuestas deben ser planteadas para intentar disuadir a la opinión pública sobre los problemas centrales del país", dijo. Añadió que históricamente las reformas constitucionales no han resuelto los problemas que le interesa al pueblo que sus gobernantes les solucionen.
Smith, a título personal, manifestó que una posible reforma constitucional debe tomar en cuanta la cantidad de legisladores suplentes que integran la Asamblea, así como los suplentes de los Magistrados de la Corte Suprema de Justicia, entre otros aspectos a considerar. |