El Papa y el patriarca de la Iglesia Ortodoxa de Rumanía, Teoctist, apostaron por la búsqueda de la unidad de los cristianos para superar la separación tradicional, durante un encuentro mantenido en el Vaticano.
Teoctist almorzó el sábado con el Papa y el domingo celebró con el pontífice una liturgia eucarística en el Vaticano.
La visita del patriarca ortodoxo rumano forma parte de los encuentros ecuménicos que el Papa mantiene periódicamente, puesto que el deseo de avanzar en la unidad de los cristianos es una constante de su Papado. En el discurso del sábado, Juan Pablo II ha aseguró que la Iglesia Católica reconoce la labor de las Ortodoxas y desea prestar ayuda, al tiempo que ha subrayado su derecho y su deber de ocuparse de los fieles, dentro del principio de libertad religiosa.
El Papa abogó por formas estables de comunicación e intercambio recíproco de información entre católicos y ortodoxos y pidió una reflexión futura sobre ese mecanismo institucional. |