 |
Ella era sordomuda, por eso probablemente cayó presa fácil de las llamas  |
Todas las personas salieron corriendo, menos una. Cristina Isabel Bermúdez murió porque nadie pudo escuchar su grito de auxilio. Su voz no salió. Ella era sordomuda, por eso probablemente cayó presa fácil de las llamas que consumieron ayer varias casas de madera que están ubicadas entre calle 14 y 15, del corregimiento de Santa Ana.
El cuerpo de Cristina salió, pero desafortunadamente no era el mismo. Gran parte de su carne y sus huesos se calcinaron. Lo que quedó de ella fue sacado de entre los escombros cargada en una sábana celeste.
El incendio, que inició aproximadamente a las 6:30 de la mañana de ayer, dejó en la calle a más de 100 personas y pérdidas materiales considerables.
Informes preliminares del Cuerpo de Bomberos de Panamá revelan que este fue el sexto incendio registrado este mes. |