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Ahora, la juventud combate la delincuencia con ejercicios físicos. Las pesas son el plato fuerte en el gimnasio de El Chorrillo.  |
El populoso barrio "El Chorrillo", que se identifica por ser un sector humilde donde los jóvenes y niños crecen en medio de las balaceras, la rumba, el pescado frito y la cerveza de contrabando, ahora tiene una cara positiva: un gimnasio comunitario.
Al frente del local está el veterano dirigente chorrillero Héctor Avila, quien ahora en vez de cerrar calles y recurrir a las barricadas incendiarias, enseña técnicas de levantamiento de pesas, aeróbicos y toda clase de ejercicios.
"No todo está perdido en el barrio"- sostiene Avila y los jóvenes que lo acompañan. "Mente sana en cuerpo sano" parece ser el nuevo lema en El Chorrillo.
Avila dice que se trata de un esfuerzo para sacar a los jóvenes de las calles y las pandillas.
Es un gimnasio de los barrios bajos. Hay cerca de 100 jóvenes que entrenan todos los días.
"Lo mío siempre ha sido el fútbol, pero un grupo de jóvenes preocupados porque en el barrio sólo se invierte en bodegas y cantinas, me propusieron establecer el gimnasio y en eso estamos", destacó Avila.
Ernesto Fernández, Gerente del Banco Hipotecario, dio el apoyo y se invirtieron B/.3,000.00 para acondicionar el local y comprar equipos.
"Mi tarea es sacar a los jóvenes de las calles y de las pandillas, para que los muchachos dejen los vicios y tengan otra alternativa", dijo Héctor, quien resaltó que los chicos en vez de estar robando por allí, vienen a cultivar su físico.
Para ejercitarse, los jóvenes pagan B/.5.00 de inscripción. Lo fuerte son las pesas, pero Avila, ex miembro de la selección nacional, les dicta clínicas de fútbol a los niños. |