|
Zanahoria y garrote parece ser el proyecto de reformas tributarias. Aunque no hay un borrador en firme, algunas fuentes revelaron que el documento base fue preparado por el propio Norberto Delgado, cuando fungía como viceministro de Finanzas.
Las reformas forman parte de los acuerdos pactados en junio del 2000 con el Fondo Monetario Internacional (FMI). La carta de intención enviada ese mes a directivos de dicho organismo financiero, anunciaba la ampliación de la base del ITBM y un aumento significativo de la tasa efectiva del impuesto bancario.
El caramelito para endulzar a los contribuyentes sería el exonerar del impuesto sobre la renta a los trabajadores que ganen salarios mensuales no mayores a los 800 balboas; pero por allí mismo viene el garrote: el Impuesto de Transferencia de Bienes Muebles (ITBM) o del 5%, será extendido al sector servicio.
Los estudios indican que 200 mil panameños serán beneficiados con la exención del Impuesto sobre la Renta (I/R). Los asalariados pagan B/.100 millones más en I/R que las personas jurídicas. La tasa general de dicho impuesto es del 30% de la renta neta gravable.
Los bancos que en 1999 reportaron una renta bruta gravable de B/.500 millones, pagan generalmente una tasa del 5% del I/R. En un proyecto anterior se esperaba aumentar como mínimo a 8%. En Panamá hay 55 tributos (impuestos, tasas y contribuciones), pero cuatro de ellos: I/R, ITBM, Impuesto Selectivo y el de Importación, representan el 83% de las recaudaciones. La idea inicial de las reformas tributarias era recaudar B/.80 millones adicionales. |