En medio de un hermetismo sin fisuras, la familia de la cantante mexicana Thalía negocia un multimillonario rescate de dos hermanas de la artista, casi dos semanas después de que fueran secuestradas en Ciudad de México.
Laura Zapata (nombre artístico de Laura Sodi Miranda) y Ernestina Sodi abandonaron el teatro San Rafael el domingo 22 de setiembre por la noche, donde la primera actuó en la obra "La Casa de Bernarda Alba" y pocos minutos después su automóvil fue abordado por un grupo de individuos que las seguían en uno o dos vehículos.
Desde entonces, las únicas noticias sobre ellas las reciben los parientes cuando los secuestradores se comunican para negociar el rescate: fuentes cercanas a la familia indicaron que el primer pedido fue de 8 millones de dólares. Como no hubo denuncia formal del secuestro, la Procuraduría sólo investiga dos desapariciones y el procurador, Bernardo Bátiz, aseguró que "no es ilegal" la presencia en México de estadounidenses -contratados por el esposo de Thalía, Tony Mottola, presidente de Sony Music- que ayudarían a negociar el rescate y su forma de pago.
"Ellos negocian actualmente con la banda que tiene en su poder a sus cuñadas (de Mottola), a fin de concertar su liberación lo más pronto posible, (...)", indicó un funcionario. |