Un capitán y un sargento del Servicio de Protección Institucional (SPI), fueron dados de baja y un cabo fue suspendido por 30 días.
Un comunicado oficial destaca que el cabo y el sargento se ausentaron injustificadamente de sus puestos de trabajo, para trasladarse a Paso Canoa.
El documento no indica si los miembros del SPI estaban involucrados en acciones ilícitas y se limita a explicar que las sanciones fueron adoptadas por una Junta Disciplinaria.