El 3 de octubre de 1989 fue uno de los días más oscuros de Panamá. Varios militares liderados por el Mayor Moisés Giroldi fueron fusilados, tras el fallido intento golpista contra el general Manuel Antonio Noriega.
Además de Giroldi fueron fusilados Juan José Arza, León Tejada, Edgardo Sandoval, Jorge Bonilla, Ismael Ortega, Francisco Concepción, Feliciano Muñoz, Erick Murillo y Deoclides Julio. Nicasio Lorenzo fue luego asesinado en la cárcel Modelo.
A los militares los encapucharon y luego los barrieron a punta de metralleta. Giroldi fue fusilado en el cuartel de Tinajitas y el resto en los hangares de Albrook.
Entre los sentenciados por estos casos fueron Asunción Eliécer Gaytán, Gonzalo Chalo González, Evidelio Quiel, Noriega y Heraclides Sucre. "Chalo" González fue indultado, Quiel permanece en Costa Rica, Noriega está preso en Miami y Sucre guarda prisión en El Renacer.
La asonada fue ejecutada por la oficialidad joven de las Fuerzas de Defensa que ocupaban los mandos medios. Los cerebros de la operación fueron los oficiales: Javier Licona, Moisés Giroldi y el capitán Edgardo Sandoval. El movimiento fracasó por la falta de un apoyo convenido con el Comando Sur. El respaldo incluía sobrevuelos en Paitilla y la FAP para evitar salidas de aviones o helicópteros, cerrar el Puente de las América para evitar la incursión de los Macho de Montes, la Expedicionaria y los Diablos Rojos, así como Amador para evitar el avance de la UESAT y la compañía Victoriano Lorenzo. Al final, los golpistas -que habían capturado a Noriega- se rindieron y la mayoría pagaron con su vida.
El periodista Daniel Alonso, involucrado en la asonada, dice que sus pensamientos son para evocar el recuerdo de mis compañeros fusilados y para aquellos que lograron sobrevivir al inhumano cautiverio al que fuimos sometidos en la isla penal de Coiba.
Alonso alega que se trató de un movimiento armado que buscaba una salida institucional a la crisis en la que Noriega había sumergido al país. "Quisiera que la sociedad panameña recordara a los caídos del 3 de octubre como gente de bien, sencilla y preocupada por el bienestar del país, sostiene el periodista.
Hoy las Fuerzas de Defensa no existen, pero perdura el recuerdo de esos mandos medios liderados por Giroldi que murieron tratando de rescatar el poco honor que quedaba dentro de los muros del cuartel", manifestó.