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SU MUSICA ESTA LLENA DE ALEGRIA
Víctor Bernal ha puesto a bailar a todos, inclusive a presidentes
Florencio Gálvez F.
Crítica en Línea
Ha tenido el privilegio como intérprete de la música típica de poner a bailar a presidentes como Guillermo Endara Galimany y Ernesto Pérez Balladares, e incluso en eventos donde ha estado la actual mandataria Mireya Moscoso. Su nombre es Víctor Bernal, tiene sólo 31 años de edad, pero de los cuales ya lleva 13 como músico profesional, y admite que su padre Amadís, quien también era acordeonista y constituye su inspiración vernacular, le regala ese instrumento [acordeón] cuando sólo tenía siete años de edad. El primer salario fue de 120 balboas, pero obviamente esto cambió luego de 13 años de fecunda actividad musical. Los sueldos varían entre 900, 1,200 y hasta 1,500 balboas, pero todo depende, dejó entrever el músico que viaja en forma constante por toda la geografía istmeña y deleita con sus interpretaciones a cientos de compatriotas. Víctor Bernal nació en la ciudad de Panamá un 13 de junio, pero a la edad de un año su familia se va a vivir a Las Tablas, provincia de Los Santos. Allí pasó 5 años de su infancia y otros cinco en Guararé, una de las cunas del folclore, de donde han surgido renombrados artistas típicos panameños. Sus estudios primarios los realiza en Guararé y a los 11 años retornó a la capital. Los estudios secundarios los efectuó en el Gastón Faraudo, y completó cuatro años en la Facultad de Contabilidad de la Universidad de Panamá. El joven artista panameño se siente apegado a la llamada cumbia tradicional, y su primer baile o toque fue en un sarao en el desaparecido Toldo Los Campeones, en Calidonia, y en ese sitio estaba el célebre Victorio Vergara, allá por el año 1986. Pero no todo ha sido fácil en la vida de Víctor Bernal, pues hoy en día señala sin ambages que aquellas primeras grabaciones no eran muy buenas que digamos. Reitera que su mejor éxito es el tema "Aunque me digas borracho", y que el mismo siempre es pedido por los entusiastas bailadores en cada una de sus presentaciones. "En realidad me gusta tocar toda la noche", dijo en forma entusiasta el músico panameño, a quien apodan "El hijo de la cumbia". Existen variantes en la vida de los artistas, en lo que concierne a los toques, pues hay semanas de tres días, cuatro días y otras de dos días. "Pienso que nosotros estamos trabajando, 15, 16 y 17 noches al mes", dijo Bernal. No se lleva un control aritmético de cuántas veces ha tocado en los trece años, aseveró el artista, quien por un largo período de tiempo se vio forzado a cantar y tocar, pero las composiciones no son su fuerte. Sin embargo, hoy en día Pablo Quiñones es el cantante del grupo, y ha participado en el CD anterior, en especial, con temas como "Maldita Soledad". Ahora mismo el grupo trabaja en otro CD, que debe estar listo para finales del próximo mes, e incluye un tema que se llama "A primera vista", donde por supuesto estará Pablo Quiñones. En tanto, el patrón musical ha variado pues antes se le cantaba a una joven quinceañera o a un pueblo, pues ahora tiene un mayor contenido, es nutrido, con mensajes y letras más largas. Bernal no ocultó su admiración por el famoso Victorio Vergara (El Tigre de La Candelaria), a quien calificó como un hombre perseverante, batalló por espacio de 15 años en este género y poseía un espíritu muy alegre. Reiteró su llamado a los jóvenes, para que sigan apoyando a la música típica "y no nos dejemos llevar por la música foránea". Esta se mantiene en una alta posición, la cual no poseía en antaño, incluso era superada por el reggae, pero ahora es distinto...
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