Vendedores del mercado público y los usuarios decidieron cerrar las instalaciones del área de trabajo ante la amenaza que el Municipio, quiere privatizarlo.
Los manifestantes cerraron con cadenas las puertas del mercado que estuvo cerrado este martes y se ubicaron alrededor para protestar ante la acción que consideran pondrá en peligro sus trabajos.
Un grupo cerró la avenida central y las avenida Domingo Díaz, pero fueron desalojados por las unidades de la Policía Nacional que lanzaron dos bombas lacrimógenas para dispersar, ante la molestia de los manifestantes.
También se organizaron con una marcha desde el mercado hasta el Municipio, donde se tomaron el salón de reuniones Pedro Prestán para reclamar que no aceptarán la venta de su lugar de trabajo.
El alcalde de Colón, Antonio Latiff, conversó con los vendedores y se comprometió que no se va a privatizar el mercado, pero los invitó para que se logren los fondos de 2 millones para remodelar las instalaciones, ya deterioradas.