Las autoridades mantienen detenidos a seis sirios y liberaron a un cubano tras un supuesto y confuso intento de secuestro del vuelo 231 de COPA, cuando arribaba al Aeropuerto de Tocumen procedente de La Habana.
Los sirios detenidos fueron entregados a la Fiscalía Auxiliar para su investigación. El cubano había sido arrestado cuando intentaba hacer de intérprete entre los sirios y la tripulación del avión.
Inicialmente, la Policía Nacional describió los hechos como un intento de secuestro en el que los sirios intentaron entrar a la cabina del piloto del avión haciendo uso de un cuchillo. Después de que los sirios fueron detenidos al pie del avión a su llegada a Tocumen, portavoces de COPA y del Gobierno se apresuraron a asegurar que "no se registró un intento de secuestro", pero sí "una actitud sospechosa" de los pasajeros sirios.
El director de la P olicía Nacional, Rolando Mirones, dijo que los sirios "no protagonizaron acción violenta" alguna, aunque sí "sospechosa".
"La sospecha se debió a que tres de los ciudadanos sirios intentaron entrar a la cabina de la tripulación, aduciendo que se habían equivocado con la puerta del baño; además, uno de ellos se quedó con un cuchillo que era parte de los cubiertos que se les entregó a la hora de tomar los alimentos en el avión", añadió.