Los adolescentes siguen siendo actores principales en un guión que sólo habla de violencia, y que en cada capítulo desangra los hogares de muchas familias en Panamá, principalmente las de clase humilde.
Uno de estos jóvenes que no llegó a cumplir los 17 años, debido a que la incontrolable vorágine suicida que se vive, lo atrapó. Fue José Antonio Argüelles.
El muchacho residía en la barriada La Paz, en Mano de Piedra, en el distrito de San Miguelito, un lugar que con frecuencia hace noticia por los enfrentamientos armados con su consecuente secuela de dolor y sufrimiento.
Argüelles se encontraba en el portal de su casa, y hasta dicho sitio fueron a buscarlo sus verdugos, que sin mediar palabras le propinaron un impacto de bala a quemarropa en el abdomen.
El herido fue llevado de urgencia al Hospital Santo Tomás, donde quedó recluido en la sala de Cuidados Intensivos, pero a pesar de su juventud, su cuerpo no resistió la embestida de la bala y murió a las pocas horas de haber llegado.
No hay detenidos en este caso.
INVESTIGACIONES: MOVIL
Las unidades policiales tomaron nota del suceso para reunir evidencias y establecer el móvil del homicidio. Las primeras investigaciones se han encontrado con el "Código del Silencio", donde nadie sabe nada, sin embargo, hay varias hipótesis que se deberán confirmar durante las investigaciones.