El peligroso sector de San Joaquín, en el corregimiento de Pedregal, sigue generando noticias, y no precisamente buenas, pues la noche del sábado, otra balacera en el lugar dejó un herido de gravedad.
Las unidades policiales del área se aprestaban a hacer su cotidiana ronda cuando divisaron a un grupo de sujetos que se encontraban en actitud sospechosa en las cercanías de la Multi 48 y 49.
Fue entonces cuando los policías procedieron a dar la voz de ¡Alto! a los individuos que-ni cortos ni perezosos-decidieron que ellos no tenían por qué hacerles caso y en lugar de responderles con palabras, lo hicieron con balas.
Explica el parte policial que al verse agredidos, los policías respondieron usando sus armas de reglamento y una de las unidades logró impactar en la cabeza a José Domingo Garcés Valdespino, de 20 años.
Sus otros dos acompañantes pusieron "pies en polvorosa" y lograron escabullirse entre los pasadizos que existen en esos edificios.
El herido fue auxiliado y trasladado en principio a la Policlínica JJ Vallarino, pero por la gravedad de su estado fue remitido de inmediato al Hospital Santo Tomás, donde hasta el cierre de la edición permanecía en estado delicado.
Al lado de Garcés Valdespino se encontró un revólver calibre 38 con el que se presume se disparó contra los agentes del orden público que realizaban la ronda.
San Joaquín es considerado zona roja en la ciudad capital y es afectado constantemente por balaceras que han dejado muchos heridos y hasta muertos.
Hace algunos meses, el asalto y agresión a un grupo de conductores del transporte colectivo que cubren dicha área, provocó la suspensión de ese servicio.
Moradores del lugar se encuentran alarmados por los hechos de violencia como los del pasado sábado, y han solicitado a las autoridades que refuercen la seguridad para prevenir nuevos incidente que pueden afectar a inocentes.
En Pedregal se realizó recientemente un intercambio de armas por comida que busca sacar de circulación las mismas.