O el golpe fue muy fuerte, o el auto les salió muy malo. Lo cierto es que cuando los ocupantes del vehículo Skoda conducido por Sebastián Jiménez, de 53 años, abrieron los ojos, no pudieron creer lo que veían.
La fuerza del impacto que sufrieron con un taxi 3T-1595 conducido por Julio Hudson, de 36 años, fue tal que el Skoda quedó partido en dos pedazos. La parte frontal del auto, con motor, llantas delanteras y hasta el tablero de controles, quedó separado del resto del auto.
Este accidente ocurrió en el sector de Villa Atlántica, en el Corregimiento de Cristóbal, en Colón.
Al menos Jiménez y sus pasajeros Keosbia Orozco de 31 años, Keara Hudosn de 10, Geysza Amador de 20, y Vicente Anderson de 21 años, podrán echar el cuento, ya que sufrieron sólo heridas leves. P-17