El juicio contra cuatro ex directivos del clausurado Banco Agroindustrial e Industrial, Banaico, siguió ayer su curso al rendir testimonio Maritza Mattaden, jefa de contabilidad de esa entidad financiera.
Rechazó que se cometieron irregularidades durante el tiempo que laboró en ese banco.
Estuvo cautelosa en responder sobre la cantidad de dinero que se manejaba desde Banaico a otro local bancario ubicado en Islas Vírgenes, al ser cuestionada Cecilia López, Fiscal Primera Anticorrupción.
No obstante, aceptó que Manuel Salvador Morales, Presidente de Banaico, estaba al tanto de todo lo que ocurría en ese organismo financiero.
Por otro lado, no prosperó una petición del Ministerio Público a fin de que Morales, quien sigue enfermo, fuese interrogado para que aclarase algunos detalles sobre las operaciones del banco.
Mattaden tampoco quiso formular mayores comentarios acerca de fuertes movimientos económicos realizados pocos meses antes de la quiebra, la cual se hizo pública en 1996, en medio de una conferencia de prensa convocada en aquella ocasión por la Comisión Bancaria.
En medio de la audiencia, surgió una vez más el nombre del Banco Lyons localizado en Islas Vírgenes.
De acuerdo a informes que posee el Ministerio Público, este banco era "pura fachada", o sea, de papel, sin conocerse a fondo sus operaciones financieras.
Mientras tanto, Bruno Bemporad, otro de los directivos de Banaico, no quiso entrar en mayores detalles de este caso al sentarse en el estrado. |