Cómala sin miedo y se dará cuenta qué tan beneficiosa puede ser.
He aquí algunas indicaciones en el que se puede aplicar su uso:
Estreñimiento: tomar en ayunas una papaya con un poco de sal.
Anticonceptivo: esta virtud en la papaya es algo discutida, si bien, se sabe por ejemplo que las mujeres indias que la consume, en gran cantidad, poseen una menor capacidad reproductiva.
Infestación intestinal por Ascaris lumbricoides y tenia: ingerir una cucharada de las semillas frescas y molidas.
Inflamaciones del hígado, riñones y ovarios: El fruto maduro y rallado o licuado mezclándolo con leche o agua.
Dermatología: debido a su capacidad de disolver las proteínas, su uso es recomendado en los casos de verrugas, úlceras córneas, psoriasis, etc. En los abscesos se utiliza el látex.
Asma, fiebres y enfermedades pulmonares: cocimiento de un pedazo de la hoja (del tamaño de un billete para un jarro de agua).
Lactancia materna: El jugo lechoso de la papaya verde, untado en los pechos de las mujeres que dan de mamar a sus hijos aumenta la secreción láctea.