Cuatrocientos treinta y cinco uniformados de la Policía Nacional han sido destituidos entre el año 2001 al 2004, por hechos que denigran la buena imagen de la institución de seguridad pública.
El subdirector de la Policía Nacional, Alvin Santana, informó que los casos más relevantes los trata la Junta Disciplinaria, donde existe un abogado a cargo de la defensa de la unidad, y tres oficiales con el rango de comisionados que hacen el papel de "jueces", y dependiendo del caso, su decisión puede ser entre 30 a 61 días de arresto para la unidad investigada, amonestaciones, destitución o declararlo inocente.