La oposición conservadora y liberal aspira a recuperar el poder en las elecciones alemanas del próximo domingo, en las que se presenta como la única fuerza que puede dar al país el dinamismo.
La Unión Cristianodemócrata (CDU), la Unión Cristianosocial (CSU), formación hermana de Baviera, y el Partido Liberal (FDP) han declarado ya que si ganan las elecciones del domingo, volverán a formar coalición como hasta hace siete años.
La candidata a la Cancillería, Angela Merkel, confía en la "voluntad de cambio" dentro de la población propiciada por la situación del país, por los cinco millones de parados, la deuda pública y el problema demográfico por la baja natalidad.