"Belleza coreana" fue la más reciente exposición que realizó Yoon Jung Kwon, una artista coreana que encuentra en la pintura una forma de comunicarse y de descubrirse a sí misma.
Con poco dominio del idioma español, la pintora aseguró que en compañía de los sonidos de la música de cellos acostumbra a crear sus propuestas que aportan versatilidad a las artes plásticas.
Al enfrentarse a los lienzos, con pinceles y una amplia gama de colores en mano, esta señora ha logrado superar problemas y descifrar el misterio que enmarca los trabajos de Van Gogh, la versión de la Mona Lisa, o los cuadros de Botero, aplicando colores más fuertes o mostrando el movimiento de dos mujeres de Picasso que corren frente al mar, plasmándolo en su obra.
Yoon nos dice que aunque replica el trabajo de grandes maestros de la plástica, con un toque muy suyo, también realiza sus propios trabajos en los que resaltan la belleza de los paisajes tropicales de Panamá y Kuna Yala.
Su descendencia oriental está presente y los cuadros de su más reciente exposición es prueba de ello, unas 15 obras que se encuentran en la Galería Mery Palma, en el Hotel Sheraton.
El maestro de Yoon es Silfrido Ibarra, pintor panameño, y resalta que su alumna "actualmente muestra una variedad de propuesta, pero que más adelante se inclinará por un estilo que la identifique. Yoon es dueña de disciplina y maneja la técnica con mucha expresividad".
Yoon, regala a la gente su modo de ver la vida y su modo de apreciar el arte en un esfuerzo de optimismo y paz.