El ex futbolista argentino Francisco Varallo, último sobreviviente de la final del primer Mundial de la historia disputado en 1930 en Uruguay, murió ayer en su casa de las afueras de Buenos Aires a los 100 años, informaron sus allegados.
Varallo era el jugador más joven de la Selección de Argentina que cayó ante la de Uruguay por 4-2 en el encuentro decisivo disputado en el estadio Centenario de Montevideo, el 30 de julio de 1930.
"El cañoncito", como le llamaban los hinchas, fue poseedor del récord de máximo goleador del Boca Juniors en la era profesional iniciada en 1931 con 194 goles hasta 2009, cuando fue superado por Martín Palermo, actual jugador del popular club auriazul.