Los panameños ya empiezan a demostrar su rechazo al pretendido aumento de peajes en el Corredor Sur. La ciudadanía debe organizarse para darle ya un alto a tanto abuso. Nadie entiende como una empresa que tiene ingresos diarios por los peajes que pagan cada día miles de usuarios y que además recibió 25 hectáreas de terrenos del antiguo aeropuerto de Paitilla, donde hoy funciona el mall Multi Plaza y autorización para rellenos por 35 hectáreas en Punta Pacífica, pretenda reclamar incremento de peajes.
Los conductores pagan cada día una fuerte suma por usar una vía donde en las horas picos se forman tranques en sus entradas, salidas y entronques. Además las carreteras de acceso están llenas de huecos.
Pocos pueden dudar que la empresa que logró la concesión del Corredor Sur hizo el negocio de su vida. Alegar lo contrario sería tomar de tontos a todos los panameños.
Los contratos entre ICA y el Estado panameño le permiten incrementar el peaje en un 25% anual, plazo que se cumple cada mes de junio. Ya están en negociaciones con los representantes del gobierno.
De seguro que luego aparecerá un funcionario parlanchín dándonos la gran noticia de que el alza no será del 25%, sino del 10%, como si los panameños fuéramos una partida de tontos.
Desde hace más de un año se planteó hacer una auditoría a los libros de ICA Panamá. ¿En qué quedó esa diligencia? De seguro que en nada, porque nada se ha sabido.
El panameño debe tomar acciones. Si insiste en el alza de peajes, habrá que levantarse más temprano y no utilizar esa vía. Frente a funcionarios que no defienden a los consumidores, esa es nuestra única arma de defensa. Si muchos panameños hacen esto durante una semana, otro gallo cantaría.