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Young con la victoria  |
El Mundial de atletismo de París vivió ayer martes su segunda jornada consecutiva de sorpresas con la derrota del favorito estadounidense Tyree Washington, segundo en la final de 400 metros detrás de su compatriota Jerome Young, y la eliminación en semifinales de 100 metros vallas, de la leyenda norteamericana Gail Devers.
Además de las sorpresas de Devers, que buscaba su cuarto título, pero que se vio desequilibrada en la cuarta valla de su semifinal, y de Washington, sucesor declarado de Michael Johnson, el pentacampeón mundial de disco, el alemán Lars Riedel, no consiguió su sexta corona y sólo puso ser cuarto.
Una de las pocas atletas que cumplió los pronósticos fue la mozambiqueña Maria Mutola, que logró su tercer título de 800 metros (59.89), aunque se vio favorecida por la ausencia de sus más directas rivales la austríaca Stefanie Graf y la eslovena Jolanda Ceplak.
Young, de 27 años, nacido en Jamaica pero criado en Estados Unidos, donde se naturalizó en 1995, había terminado previamente apenas quinto y cuarto en los Mundiales de 1997 y 1999, ganó con un tiempo de 44.50, sacando 27 centésimas al favorito Washington. La medalla de bronce fue para el francés Marc Raquil.
"He esperado mucho tiempo para esto y al final ha llegado. Es fantástico", dijo Young, la eterna promesa de 400 metros.
Devers, doble campeona olímpica de 36 años parecía tener control de la carrera hasta que tocó una de las vallas finales, lo que la desequilibró un poco y aunque terminó en tercera posición de la carrera (12.68), no fue suficiente para lograr una plaza en la final.
Otra sorpresa, fue la victoria de un qatarí, Saif Saaeed Shaheen, en la prueba de 3.000 metros obstáculos, normalmente dominada por los kenianos. |