Un sistema computarizado de huellas digitales ha ayudado a la patrulla fronteriza estadounidense a arrestar indocumentados con historiales de delincuencia o de inmigración ilegal, cuando intentan reingresar a Estados Unidos a través de Arizona.
A partir de octubre, los agentes que patrullan el sector de Tucson han aprehendido a más de 10,700 personas que son buscadas por delitos o de violaciones a las leyes de inmigración.