El factor económico se ha convertido en el peor enemigo para una joven que padece una enfermedad que nunca se había presentado en Panamá, y sólo puede ser operada en Estados Unidos por un costo de 147 balboas.
La vida para Marisol Chérigo, una hermosa joven de 20 años no ha sido fácil, y a pesar que logró llegar hasta la universidad no ha podido graduarse de profesora, porque ahora su lucha es contra la muerte.
Marisol cuando pequeña presentaba convulsiones, se le dormían las manos y pies, en el Hospital del Niño se decía que era un problema abdominal.
Ceferino Chérigo, padre de la joven, cuenta que para ellos esta enfermedad de su hija, los mantiene muy tristes y preocupados, ya que sólo en Nebraska, EU, se podrá efectuar la operación, pero necesitan más de 147 mil balboas.