Saturnino Mariscal, de 29 años, murió atropellado por una camioneta, cuyo conductor se dio a la fuga. El pobre hombre falleció en la parada de autobuses del corregimiento de Cativá.
El accidente ocurrió aproximadamente de las 3:30 de la madrugada de ayer.
Los familiares dijeron que Saturnino era un joven que ayudaba a su madre en la venta de extintores en la Zona Libre de Colón y a esa hora de la madrugada se dirigía a su vivienda.
"Cholo", como era conocido, dejó en la orfandad a tres niños.