La suerte está echada para unos 546 presos de nacionalidad colombiana detenidos en cárceles de Panamá. Todo por el mero hecho de que la Corte Suprema de Justicia en Bogotá dictó un fallo que obliga a resolver el problema de hacinamiento de prisiones en el vecino país, antes que traer más detenidos a Colombia, según destaca Juan Fernando Jaramillo, cónsul de Colombia en Colón.
"El presidente (Alvaro) Uribe está atado de manos, más o menos, ante la situación de los detenidos en Panamá. Este tema es una prioridad sensitiva de Colombia, de nuestra delegación diplomática y del Gobierno, pero no podemos hacer nada", destacó Jaramillo ante los impedimentos judiciales existentes en su país.
Las declaraciones del cónsul se dan en momentos en que crece la presión en ambos países por la urgente definición de la situación legal de los detenidos colombianos.
Cerca de 546 colombianos están presos en Panamá y unos 100 efectúan una huelga de hambre desde hace dos semanas.