Los precios del crudo volvieron a marcar un máximo histórico , después de que datos económicos de Estados Unidos mostraran que la presión inflacionaria persiste y se pronosticara una nueva disminución en los inventarios de crudo.
El crudo ligero estadounidense pára septiembre subió hasta 93 centavos, a 46,95 dólares el barril, récord en los 21 años de historia de la Bolsa Mercantil de Nueva York, antes de cerrar a 46,75 dólares. El crudo de referencia Brent del Mar del Norte cérró con alza de 30 centavos, a 42,99 dólares el barril.
Los precios subieron después de que el gobierno estadounidense informara que los precios al consumidor cayeron en julio por primera vez en ocho meses, aunque el mismo reporte dejó entrever que las presiones inflacionarias no habían desaparecido.