Las organizaciones de masas de Cuba se han movilizado para incrementar la vigilancia y activar los mecanismos de defensa ante una eventual agresión externa o una revuelta interna, mientras se mantiene el hermetismo sobre el estado de Fidel Castro.
Como en días anteriores, Cuba amaneció en calma y con normalidad, aunque también con incertidumbre porque ni Raúl Castro ha comparecido en público todavía ni se han divulgado informes médicos sobre la salud de Fidel Castro. Desde el martes, miles de trabajadores han participado en actos de reafirmación patriótica realizados en centros de trabajo.