Como falsos y provistos de muchas especulaciones, catalogó el ministro de Educación, Salvador Rodríguez, los rumores de que renunciaría al cargo al estar recibiendo presiones de diversos sectores vinculados a esta institución.
"Nada más alejado de la realidad. Mi compromiso al frente de este ministerio es hasta el 30 de junio de 2009, y la única manera que salga antes, es que el señor presidente me pida mi renuncia", precisó Rodríguez.
De acuerdo con Rodríguez no hay razones que lo lleven a una eventual renuncia, ya que por ahora, se están cumpliendo los preceptos para los que fue nombrado, tal y como es la normalización del calendario escolar y la eliminación del problema de la fibra de vidrio.