El Gobierno Nacional sigue al pendiente de la crisis política en Honduras. "No estamos de acuerdo con ningún tipo de llamado a la insurrección popular entre los hondureños, la solución al problema tiene que ser por la vía diplomática y a través de la conciliación del sistema político hondureño", aseguró ayer el Canciller, Juan Carlos Varela.
Las declaraciones de Varela surgen luego que Zelaya llamó la semana pasada a sus compatriotas a levantarse contra el Gobierno encabezado por el gobernante de facto, Roberto Micheletti.
Esta semana que inicia debe darse una reunión de Cancilleres de la región donde se evaluará la situación en Honduras y se definirá el accionar internacional frente a la crisis.
Destacó Varela que este tema no debe verse desde el punto de vista ideológico, sino que la solución al problema debe ser por la vía del diálogo.
"Por más que el Gobierno de facto de Honduras no representa la voluntad popular, está de una forma u otra representando a ciertos poderes constituidos del Congreso, la Corte Suprema, las Fuerzas Armadas y los partidos políticos", dijo.
Varela indicó que la comunidad internacional debe otorgar todo su apoyo a la mediación iniciada la semana pasada por el presidente de Costa Rica, Oscar Arias, a propuesta de Panamá y Colombia.
El diplomático dejó claro que Panamá rechaza "cualquier injerencia" externa en el conflicto hondureño que no sea la mediación de Arias.
"Hago un llamado al presidente constitucional que nosotros reconocemos, al presidente Zelaya, a que actúe con prudencia y moderación porque los líderes tienen que pensar en sus pueblos", expresó el Canciller a través de nota de prensa.