El estadounidense Lance Armstrong, siete veces vencedor del Tour de Francia, dio explicaciones sobre las polémicas manifestaciones en las que llamó "dopados" a los futbolistas franceses, aseguró que fue "una broma en un programa de televisión" y recalcó una vez más que adora a Francia y a los franceses".
"Adoro a Francia y a los franceses, así como la cultura de este país. No niego lo que dije, lo que lamento es que la interpretación no se ha hecho correctamente en Europa", dijo.